Una pequeña historia

Mi padre cuando era yo chico contaba una bella historia libre cuyo personaje es nada menos que Zaratustra. No se si se conoce el autor, hasta que lo sepa, pondré "autor desconocido".

Un día, Zaratustra estaba solo, meditando y comiendo lentejas, cuando un súbdito del rey se aproxima.
- Te das cuenta Zaratustra -dijo - Si hubieras aprendido a adorar al rey, no estarías solo, comiendo lentejas.
- Y vos te das cuenta - respondió Zaratustra - si hubieras aprendido a sólo comer lentejas, no tendrías que adorar a ningún rey.

Un saludo

Sra. Balanza

Que la señora justicia se saque de una vez la benda,
y que vea, que vea su balanza desequilibrada.
que nos explique por qué los pibes comen de la basura.
Que de una vez sienta vergüenza de su trabajo,
sienta la misma tristeza que sentimos día a día,
cuando nos enteramos de sus decisiones.
Que, abandonando su ceguera, no elija mirar para otro lado.
Y que al fín y de una vez por todas,
el sol de julio a todos nos cubra.
Que se pregunte quién borró su memoria...
Y quién le bendó los ojos.
Que, de una vez por todas, enderece su balanza.

La historia somos todxs

Que bronca nos da a cada uno de nosotros y de nosotras cuando vemos a nuestro alrededor y encontramos individualismo, apatía y nihilismo como única expresión de la juventud.
Que tristeza sentimos cuando nos damos cuenta que las banderas que flameaban y esperanzaban ya no tienen sentido para la gran mayoría. Que la mano se tiende al traídor y el puño se levanta contra el compañero. Que los asesinos viven felices en sus mansiones y que todo se olvida facilmente, incluso el genocidio.
Revisamos la historia, con el sabor amargo de no haber nacido en otra época, menos tonta, no como esta. La época en que los estudiantes conocían su lugar, lo hacían respetar, vivían y morían por llegar, algún día, a un mundo mas justo.
Es nuestro deber el recordar, seguir levantando las banderas que levantaron nuestros padres, nuestros abuelos, nuestros amigos, nuestros hermanos, en fin, nuestros compañeros; para que su vida y su muerte no haya sido en vano, y para que, más temprano que tarde ojala, ese mundo nuevo que llevababan (y llevamos) en nuestros corazones, ese mundo para muchos imposible, esté frente nuestro
Cuando levantamos una bandera, también están presentes todos los compañeros/as caídos. Cuando levantamos una bandera, ellos también la levantan, cuando cantamos, lo hacemos con ellos. No son distintas banderas, no es distinta la idea, es la misma idea, las mismas banderas que no mueren, que nunca morirán mientras haya un grupo conciente. La historia no solo está en los libros. También está en la calle, en los trapos, en los cantos, en una escuela y en los cementerio y es deber de todos mantenerla viva, recordarla, y escribir un futuro mejor.

JUICIO Y CASTIGO A LA JUNTA MILITAR
APARICIÓN CON VIDA DE JULIO LOPEZ Y CASTIGO A LOS CULPABLES
NO OLVIDAMOS, NO PERDONAMOS.
SEGUIMOS EN LUCHA
AHORA Y SIEMPRE.
SALUD Y LIBERTAD!